De las películas siempre se dice que las segundas partes nunca fueron buenas, pero en la vida real aún está por comprobar. Uno de los barcos más emblemáticos de la historia, el Titanic, tendrá una nueva oportunidad de navegar por los mares. Bajo el nombre de Titanic II, esta réplica exacta a su antecesor permitirá a los viajeros vivir una experiencia idéntica a la que vivieron en 1912, pero sin naufragio. ¿Te animas?
Hace 103 años se produjo el hundimiento del barco más grandioso que se había hecho hasta el momento, el Titanic. Hasta la fecha solo podíamos disfrutar de su belleza a través de las películas y documentales, recreaciones por ordenador, maquetas o con las imágenes del casco del barco en las profundidades del mar. Pero, ¿qué os parecería si pudiéramos disfrutarlo en vivo?
No es un sueño sino una realidad. La empresa Blue Star Line se ha embarcado en la aventura de recrear el Titanic. El nuevo barco llevará el nombre de Titanic II y será una réplica exacta al primer Titanic, con todos los detalles de 1912. Incluso se dice que han decidido recrear alguna zona de la nave de las que aparecían en la película del director James Cameron.
Para la tranquilidad y comodidad del pasaje interesará saber que el Titanic II incorporará toda la tecnología que existe hoy en día para la navegación, para incrementar la seguridad durante el viaje y evitar el fatídico accidente. También dispondrá de aire acondicionado y conexión Wifi.
Como curiosidad, el barco estará dividido como el original: por clases sociales. Existirán camarotes de primera y segunda clase, al igual que el comedor que tendrá su diferenciación de clases con la decoración que tenía cada una de las partes. ¿También existirá la zona de los polizones?
Hasta el momento se desconocen los precios, aunque imaginamos que según la clase social en la que quieras estar será más o menos accesible. Lo que se sabe con certeza es que la compañía pretendía que el Titanic II surcara los mares el próximo 2016 y su primer recorrido, podría ser el mismo que comenzó su antecesor, como homenaje a todas aquellas personas que perdieron la vida en el fatídico accidente y a sus creadores. La realidad es que el proyecto anda con algo de retraso y posiblemente no veremos su botadura hasta dos años después de su planificación inicial.
En cualquier caso se trata de un viaje en el tiempo muy apetecible para los amantes de la historia naval.