Cuando publicamos un post en Facebook pretendemos que el mayor número de gente lo lea y entre en el enlace que ofrecemos. En los últimos años han surgido técnicas para conseguir un mayor número de clicks que la red social de Mark Zuckerberg castiga. Una de ellas es el click-baiting. ¿Qué es y por qué está perseguida por Facebook?
Las redes sociales resultan imprescindibles a la hora de promocionar nuestra página web. Facebook y Twitter son las redes más utilizadas con diferencia. En ellas publicamos mensajes y promociones para captar la atención de nuevos clientes y seguidores y conseguir un mayor engagement -una mejor relación y más estrecha con ellos-.
Antes de nada deberemos estudiar con profundidad en qué redes nos va a interesar estar presentes y qué mensajes van a ser los más adecuados para nuestro público objetivo. Para ello elaboraremos un plan de trabajo, que nos va a resultar muy útil para conseguir de forma más eficaz nuestros propósitos.
Debemos cuidar con profundidad los mensajes que publicamos: la hora de publicación, las imágenes, el lenguaje, los enlaces… Todo ello podrá reportar ventajas o desventajas a nuestra empresa en función de su utilización.
En muchas ocasiones se tiende a un uso de las redes sociales un tanto fraudulento con el objetivo de conseguir un mayor CTR– click through rate, que significa una mayor tasa de clicks en nuestro enlace-. Para ello se recurren a técnicas que las redes están empezando a penalizar. Aunque son legales, a redes como Facebook no les gusta y ha decidido castigar a quienes las utilicen.
Especialmente hablamos del click-baiting o la búsqueda del click fácil. Las publicaciones basadas en ella contienen información incompleta sobre un artículo o una página, incitando a los usuarios a que pinchen y abran el enlace para ir hacia esa web. Ejemplos de ello son las célebres frases que encontramos a lo largo del día en esta red social del estilo de “Nunca te imaginarás lo que pasa cuando…”, “Esto es lo que sucede si…”, “Adivina quién…”, creando expectativas en los usuarios, que inevitablemente sienten el deseo y la curiosidad de seguir leyendo y saber todo.
Aunque a simple vista pueda parecer algo normal -pues ya estamos acostumbrados a estas publicaciones-, Facebook quiere castigar a este tipo de publicaciones porque en la mayoría de los casos carecen de valor. Pero ¿cómo va a medir si una empresa hace click-baiting en su perfil de Facebook? Principalmente a través de tres maneras:
- Midiendo el tiempo de permanencia de los usuarios en las webs a las que dirigen los enlaces. Si ese tiempo es muy corto, quiere decir que la publicación con dicho enlace ha podido engañar a los usuarios y, por tanto, carece de valor. Este es un caso de página que sería penalizada por Facebook.
- Comprobando si tiene muchas reacciones -«Me gusta» y demás-, pero pocos comentarios y poca gente que lo haya compartido. En ocasiones, algunos perfiles intentan atraer a los usuarios diciéndoles que si dan a “me gusta” conseguirán algo -incluido concursos-. Casi siempre se tratará de una mentira. También se verán castigados por la red de Zuckerberg.
- Castigando a las páginas que incluyen publicaciones de imágenes con un enlace en el texto. De este modo favorecerá a aquellos sitios que incluyan enlaces con una imagen que se cargue por defecto.
A partir de ahora deberemos cuidar aun más el modo de publicar nuestros posts en Facebook. Para ello podremos seguir estos consejos. Deberemos analizar si lo que hacemos no atenta contra la política de la red y que no se verá penalizado, pues al final la perjudicada sería nuestra empresa. Tendremos que evitar el click-baiting y todas aquellas técnicas perseguidas desde hace poco por Facebook. Debemos generar contenido de calidad y enlaces no engañosos. Debemos facilitar todas las acciones a nuestros usuarios, avisándoles de lo que van a encontrar si siguen el enlace que hemos compartido. Es hora de centrarnos única y exclusivamente en nuestros clientes.