Si queremos que nuestro producto llegue al mayor número posible de personas, podemos optar por el trayecto lento, gratuito y natural -SEO- o por el rápido y de pago -SEM-. Dentro de esta última caben destacar dos grandes plataformas: Facebook Ads y Google AdWords. ¿En qué se diferencian? ¿Cuál es la mejor de las dos?
A la hora de realizar nuestra estrategia de marketing, tenemos que pensar en las distintas posibilidades que la red nos ofrece. Existen múltiples formas de alcanzar gratuitamente las primeras posiciones en los resultados de búsqueda mediante el llamado SEO. A través de enlaces, optimización de las metaetiquetas, actualización de contenidos… podremos conseguir llegar a lo más alto en los buscadores.
Sin embargo, hay otras opciones, conocidas como SEM, que nos van a permitir aparecer ante los usuarios mediante el pago de una determinada cantidad de dinero. Facebook Ads, Google AdWords o Twitter Ads son algunas de las plataformas que nos ayudarán a anunciarnos en sus páginas. No obstante, son las dos primeras sobre las que recae el mayor peso, al concentrar el mayor número de usuarios y conseguir los mejores resultados.
Aunque el gigante Google ha sido siempre el líder de la publicidad online, en los últimos años le ha surgido un claro competidor: Facebook Ads. Ambas se basan en el PPC o Pago Por Click, es decir, se paga en función del número de clicks recibidos por el anuncio.
Cuando tengamos que elegir cuál es la mejor opción para insertar nuestros anuncios, deberemos tener en cuenta diferentes aspectos, pues son muchas las diferencias que presentan ambas.
Segmentación
Los anuncios en Google se pueden segmentar en función de diversos aspectos, como por datos demográficos, geográficos o intereses personales. Sin embargo, la red de Zuckerberg ofrece muchas más opciones gracias a los diferentes datos aportados por los perfiles de los usuarios: edad, sexo, estado civil, gustos, amigos…, apostando por un mayor poder de segmentación.
Actitud
La actitud de los usuarios que utilizan Google es más activa ante los anuncios que los de Facebook. Cuando un usuario ve un anuncio en la página de Google se debe principalmente a que antes ha realizado una búsqueda relacionada con esa publicidad. De esta manera, hay más posibilidades de que esas personas pinchen en los anuncios que han aparecido. Por el contrario, la actitud de los usuarios de Facebook es más pasiva. La publicidad les aparece cuando están realizando otras tareas, como conversar con amigos, leer publicaciones, avanzar por el timeline, comentar… En estos casos, al no haber solicitado esa respuesta que está dando la publicidad, es menos probable que estas personas pinchen en esos anuncios, a menos que estén totalmente interesados en los productos o servicios que se publicitan.
Utilidad
Google AdWords resulta útil para anunciar productos conocidos, obteniendo resultados más afines en las búsquedas. Si utilizamos la plataforma de Google para publicitar un producto novedoso que poca gente conoce, obtendremos muy malos resultados, ya que, al ser poco conocido, poca gente utilizará el buscador de Google para encontrarnos. Para publicitar productos, servicios o una marca nueva y/o poco conocida, Facebook Ads será la mejor alternativa, pues sirve especialmente para mejorar el branding -construcción de una marca y darla a conocer-. En esta última, no hace falta que los usuarios nos busquen; nuestros productos publicitados aparecerán inevitablemente en su muro de Facebook.
Presupuesto
En Facebook Ads puedes empezar gastando un euro y podrías empezar a conseguir resultados. Sin embargo, en Google AdWords necesitarás aportar una mayor cantidad de dinero. Si inviertes muy poco dinero, este no será suficiente para competir en las pujas y, por lo tanto, no conseguirás resultados.
Boca-oreja
En Facebook, cuando una amistad sigue a una marca o le da a «Me gusta» a un determinado producto, sus amigos pueden verlo y, por tanto, esa “información” servirá también para publicitar la marca entre sus contactos. Que alguien hable directa o indirectamente de un producto o servicio permitirá a otros conocerlo e interesarse más por él. En Google los resultados no son los mismos. Esto se ha intentado con Google+, pero no se consigue lo mismo debido a la poca cantidad de usuarios activos en esta red social.
Desventajas
En Facebook vamos a ignorar en muchas ocasiones los anuncios de nuestra timeline debido a que, en el momento en que aparecen, estamos realizando otras tareas. En Google, mucha gente ha desarrollado la capacidad de desatender y olvidar los resultados que aparecen en las primeras posiciones como publicidad, por lo que a veces los resultados con estos anuncios no son los esperados.
En realidad no hay ninguna opción mejor que otra. Hay que analizar lo que nos ofrece cada una de las dos plataformas y sus herramientas y elegir la que mejor nos convenga en función de los objetivos y de la estrategia que definamos. Lo que sí parece estar claro es que si nuestro producto es totalmente novedoso y diferente, Facebook Ads será nuestra mejor opción; pero si el producto es muy buscado en la red, será mejor recurrir a Google.
Nunca será obligatorio elegir una u otra, sino que ambas son complementarias. Lo mejor es buscar un equilibrio entre ambas, de tal manera que consigamos los mejores resultados posibles y que un mayor número de personas conozca nuestros productos.